
La filofobia es un tipo de trastorno de ansiedad que se caracteriza por el miedo a enamorarse o a mantener una relación estable. Este trastorno afecta a quien lo padece de distintas formas según el grado de filofobia que tenga y, por lo tanto, afecta en mayor o menor medida su vida amorosa y social. Sin embargo, no acaba ahí ya que la filofobia puede también desencadenar problemas en ámbitos profesionales, personales e incluso de salud.
Se dice (yo incluida), que el estar enamorado es una de las mejores sensaciones experimentadas por el ser humano.
Una experiencia increíble a nivel físico y psicológico que cambia la forma como se ve el mundo y se afronta la vida. Una situación que despierta un sin número de reacciones químicas en nuestro cerebro y, por lo tanto, en todo nuestro cuerpo.
Muchos podemos dar testimonio positivo del enamoramiento, pero no es el caso de los filofóbicos.
Aquel enamoramiento que muchos consideramos maravilloso, para quien tiene filofobia se convierte en una situación que produce gran malestar y estrés, en consecuencia, estas personas acaban por rehusar y huir de relaciones potencialmente positivas.
Para comprender mejor este estado de miedo, debemos adentrarnos un poco más en el conocimiento de nuestro propio cerebro y en los diferentes procesos de aprendizaje que éste realiza.
La capacidad del permanente aprendizaje
El aprendizaje humano necesita de múltiples estructuras cerebrales implicadas en diversos procesos. Afortunadamente, nuestro cerebro no es una estructura con capacidades innatas determinadas. La interacción constante entre nuestro entorno sociocultural y nuestra propia genética, es la que posibilita la maduración y los aprendizajes del sistema nervioso.
Todos estos aprendizajes modifican las conexiones de nuestro cerebro que tienen un desarrollo espectacular en los primeros años de vida y, al contrario de lo que se pensaba hasta no hace mucho, continúan modificándose hasta la muerte. A este fenómeno se lo conoce como neuroplasticidad cerebral y se refiere a la capacidad del sistema nervioso para cambiar su estructura y su funcionamiento a lo largo de nuestra vida, como reacción a la diversidad del entorno.
Junqué y J. Barroso (2009) señalan que la plasticidad neuronal está siempre presente en el cerebro en desarrollo y durante toda la vida. Por lo tanto, la finalidad del aprendizaje es conseguir una mejor adaptación funcional al medio donde como seres humanos habitamos.
Ahora bien, la pregunta más importante para descubrir los motivos del miedo a enamorarse es conocer
¿Qué aprendizajes guardas de tus experiencias amorosas?
Ante cada experiencia existen siempre diferentes ángulos de percepción que resultan en una amplia variedad de aprendizajes. Y, aunque las experiencias puedan ser similares, cada persona decide qué enseñanza aprender.
O, como lo se lo digo a las mujeres que trabajan conmigo, «¿qué historia es la que decides contar?»
La raíz del miedo a enamorarte
El miedo a enamorarte proviene de la idea que tú tienes en tu mente respecto al significado de enamorarte.
Permíteme contarte una breve historia y luego, en base a ella descubriremos la raíz de tu miedo a enamorarte.
«Él es lo que mi abuela llamaría un buen hombre. Tiene una profesión, buenos modales, una gran sonrisa y muchos sueños por cumplir. Yo lo quiero porque lo conozco, sé que tiene emociones buenas y me encantaría verlo feliz junto a alguien. No es que piense que necesita una pareja, es que yo sé el gran corazón que él tiene y yo le deseo que viva un amor bonito. Yo le deseo únicamente lo mejor. Te estoy hablando de mi mejor amigo.
Lo conozco desde siempre, recuerdo su ansiedad cuando de adolescentes él estaba enamorado. Recuerdo que parecía sufrir de amor, pero en realidad no era muy comprometido con ninguna de sus relaciones. Luego, de adulto se sumergía temporalmente absorto en sus relaciones y luego reaparecía como quien descubre de su libertad por primera vez. Según él ninguna mujer lo entiende. Tiene el loco interés por alguien, pero luego se dice a sí mismo que en realidad no vale la pena.
Vive relaciones intensas que sabe muy bien que no lo llevarán a nada, mientras que rechaza a otras chicas que sí desean una relación con él. En fin, tan solo deseo que mi amigo un día decida construir una relación bonita»
Cuéntame algo… ¿te sientes identificado de alguna forma con esta historia? ¿Tienes recuerdos de relaciones intensas, pero no te sientes orgulloso de ellas? ¿Tuviste contacto con parejas que quería una relación, pero sentiste que no te entendían? ¿Tienes buenos sentimientos e interés por una pareja, pero la relación te genera ansiedad? ¿Amas tanto tu vida que no estás dispuesto a perderla al tener que compartir con una pareja? ¿Crees que al tener una relación de pareja te perderás a ti mismo?
La respuesta a cualquiera de estas preguntas te puede dar una señal del aprendizaje que estás decidiendo obtener de las experiencias y ante eso tengo varias afirmaciones que quiero compartir contigo y que deseo que jamás las olvides:
Afirmaciones sobre las experiencias amorosas:
- No todas las relaciones son para siempre y eso está bien.
- Tener una relación de pareja no significa renunciar a tu vida.
- Las mejores relaciones amorosas tienen diferencias y discusiones.
- Una relación sana requiere que tú tengas tu propia vida más allá de la relación.
- La relación se construye con aquello que tú deseas compartir.
- Una relación amorosa sana te permite ser tu mismo y querer ser la mejor versión de ti.
- Cuando quieres construir una relación negociar no significa perder.
- Una relación amorosa sana no incluye un torbellino de ansiedades.
- Incluso en una relación de pareja, lo más importante es como te sientes contigo mismo
¿Eres consciente de la historia que te repites a ti mismo?
Si tomas la decisión de no tener una pareja tienes que asegurarte de cumplir con los siguientes 2 requisitos:
requisito # 01: Afirmar que no quieres una pareja por motivos propios, presentes y reales.
Eso significa, excluir cualquier referencia de experiencia pasada (buena o mala) y excluir cualquier argumento que no sea personal (las historias de los fracasos de otros).
requisito #02: No hacer ninguna afirmación absoluta o general.
Eso significa no afirmar que los hombres o mujeres no te entienden, que nadie tiene la misma visión de vida que tú, o que todos terminan como tú no quieres terminar. Si es que tú decides no tener una relación amorosa es porque decides no conocer si otras personas tienen visiones de vida similares a los tuyos, ni comprometerte voluntariamente a descubrir cómo construir la relación amorosa que tú quieres para ti.
Como puedes ver, con estos requisitos, tus pensamientos pasan a tener un enfoque diferente y bastante más real.
La mayoría no es consciente de su problema de filofóbia y culpan a otros de su situación repitiendo una y otra vez aquel historial que los precede y acentuando aún más esos miedos al compromiso y relación sana.
Y los miedos no necesariamente provienen de una mala experiencia amorosa. Estos pueden provenir de la relación con sus padres, o con viejos amigos, del miedo a quedarte solo, o incluso de relaciones de otras personas cercanas.
Cómo empezar a vencer el miedo a enamorarse
Es evidente que tener pareja cambia ciertos aspectos de tu vida; ya no puedes hacer todo lo que te apetece en todo momento, tienes que aprender a repartir tu tiempo y desearás reposicionar algunas de tus prioridades. Ningún cambio será obligatorio y tú únicamente deberás comprometerte a aquello que deseas. Y créeme, cuando quieres construir una relación, no tienes dificultad de cambiar tus prioridades. Pero eso no significa, en ningún momento, abandonarte a ti mismo. Por el contrario, para mantener una relación sana de pareja, necesitas tener tu propia vida y tu propia felicidad para compartir.
A continuación te doy algunas claves para perder el miedo a enamorarte:
Decide vivir una historia diferente: Tu problema se va a solucionar de un día para otro, pero es momento de aceptar que tienes miedo a las relaciones de pareja y empezar a analizar a qué es exactamente a lo que le tienes miedo y si es que se debe a razones presentes, reales y propias.
Afronta tus miedos: la mejor forma de superar este tipo de trastornos es afrontando aquello que te provoca miedo. Comprende cuál es tu miedo real definiéndolo de la forma más completa posible, entendiéndote a ti mismo te ayudas a entender a qué tienes miedo y también a entender qué es lo que deseas.
Vive más consciente de ti: No te atormentes con el futuro preocupándote en base a hipótesis y posibles sucesos que jamás pasan. Piensa en el hoy y disfruta el día a día, atrévete a descubrir más de ti mismo y de la vida. Al descubrir más tendrás más herramientas para construir una nueva historia.
Busca ayuda: Buscar ayuda es una característica de las personas más inteligentes. Si este es un tema que perturba tu bienestar, apóyate en personas especializadas.
Mucha suerte y hasta pronto
Marie
0 responses on "La Filofobia o el Miedo a Enamorarse"